A finales del siglo VII aparecen establecidos al oeste de Oaxaca los
mixtecos. Durante el siglo IX se imponen como clase dominante en muchas
ciudades estados del centro de México. Alrededor del año 1000 y como
consecuencia de la presión de los toltecas, invaden el territorio zapoteca.
Entre los siglos XI y XII de nuestra época, los
mixtecos adoptaron una influencia tolteca cuya característica civilizadora los
motivó a buscar asentamientos más estables que los que habían tenido; se
dedicaron a dominar a los zapotecas por medio de invasiones de sus tierras,
guerras y alianzas políticas por matrimonios. De ese modo se apoderaron, por
ejemplo, de Monte Albán, que había sido abandonada por los zapotecas y los
mixtecos convirtieron en necrópolis, enriqueciendo notablemente sus monumentos
funerarios. Tanto en esa ciudad, como en Mitla, aportaron conceptos
arquitectónicos evolucionados como las grecas geométricas de piedras
ensambladas que adornan los palacios. Otras ciudades zapotecas de las que se
apoderaron los mixtecos son Zaachila y Yagul, también en el estado de Oaxaca,
con las que se complementa el conjunto del impresionante legado de estas
culturas. Los mixtecos influyeron en el declive de la civilización maya en el
sur, y permanecieron independientes de los aztecas en el norte.
En los siglos XIII y XIV se produce el apogeo
de su civilización, siendo conquistados parcialmente en el XV por los aztecas.
Entre sus especialidades se podían citar los
mosaicos de plumas, la alfarería polícroma decorada y el tejido y bordado de
telas.
Las contribuciones más importantes de los mixtecos son: los registros
pictográficos en códices hechos sobre piel de venado de la historia militar y
social que narran aspectos del pensamiento religioso, de los hechos históricos
y de los registros genealógicos de su cultura; la orfebrería, cuyas muestras
como pectorales, narigueras, anillos o aretes, demuestran que manejaron con maestría
el oro trabajado con la técnica de la cera perdida, así como el labrado del
alabastro, el jade, la turquesa y la obsidiana, entre otros.
La divinidad principal de los mixtecos era Quetzalcoatl, dios del sol y
de quien los mixtecos se consideraban descendientes directos. También rendían
culto a Tzahui, dios de la lluvia.
Los mixtecos de México influidos por los zapotecas, desarrollaron su
propia escritura hacia el año 900 después de Cristo. La escritura mixteca fue
menos avanzada que la de los mayas, quienes usaron muchos fonogramas (símbolos
que representan sonidos). En contraste los mixtecos los utilizaron únicamente
para escribir nombres.
El calendario mixteco se basó en un ciclo de 52 años. Más allá de
esa cifra no contaron años. La figura inferior muestra los días en el
calendario azteca.
Alrededor del año 1.400 después de Cristo, los aztecas adoptaron la
forma de escribir de los mixtecos, menos el símbolo del año y los nombres de
personas en el calendario.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario